Las cosas más novedosas despiertan mucha pasión. Las quieres fotografiar a cada minuto y publicarlas en redes sociales. Pero como el champán, después del estallido inicial acaban siendo aborrecidas.

Lo malo es que estemos hablando de tu casa.

El lugar en el que tendrás que seguir viviendo durante años aunque hayas pasado a repudiarla. Aunque llegue a molestarte tanta originalidad de apertura en las ventanas, mecanismos automatizados rotos a cada rato o ese novedoso material ya descolorido cuyo fabricante ha desaparecido.

La verdad, hay materiales que se usaban hace 100 años que se siguen usando hoy. 

Y también hay materiales nuevos que se seguirán usando el siglo que viene.

Igual que seguimos queriendo viviendas luminosas y bien ventiladas, algo que se puede conseguir sin más sofisticación que una buena decisión de dimensión y ubicación de ventanas.

Se trata de construir bien el marco para que luego el mobiliario le dé tu personalidad (y cuando quieras aires nuevos no tengas que hacer una costosa reforma, cambias el mobiliario y nueva temporada).

Se trata más de tirar de neuronas que de fuegos artificiales para diseñar proyectos.

Eso claro, hace que el presupuesto no sea necesario que se vaya por las nubes. Más si tratas de aprovechar todo lo que hay de partida, de una reforma o del entorno.

En cualquier caso, nada en contra si quieres invertir más presupuesto y explorar otras soluciones.

Para eso te escuchamos y dialogamos.

Para entender tus necesidades y buscar soluciones de diseño que te den bienestar cada día a ti, pero también se puedan adaptar a los que vengan después. Una casa no se hace nueva cada 5 años.

Ni tiene que ser algo hecho para que nos guste a nosotros.

Al contrario.

Nos preocupamos tanto por que el proceso de proyecto y obra deje tan contento a todos, que hasta una vez un obrero vino orgulloso a decirnos que había construido uno de nuestros edificios. Lo sentía como suyo.

Eso está bien.

Son cosas que pasan cuando asumes el compromiso de estar involucrado hasta el final del proceso sabiendo que al resultado se llega gracias a todos.

Entonces, puede ser que quieras reformar tu casa, hacerte una nueva o construir una promoción de viviendas. Vamos a empezar por entenderte y ver si te podríamos ayudar.

Rellena el formulario y vemos si podríamos trabajar juntos.

A poco que hayas hecho alguna investigación tratando de descubrir qué pasos iniciales dar para hacerte o reformar una casa, habrás visto que es todo un lío. Que te hablan de profesionales que no sabías que existían y de papeles cuyo nombre se te olvida.

Tranquilo.

Una de las primeras cosas que hacemos con nuestros clientes es explicarles todo el proceso en que se están metiendo. Esto produce mucho alivio.

Lo que luego ya te hace respirar relajado es que te acompañemos en todo el proceso de solicitud de licencias y demás burocracias como un guía que va abriendo camino entre la maleza machete en mano. 

El objetivo es que acabes viviendo en tu casa con todos los papeles en orden, para esto vamos contigo hasta el final.

Ese es el final.

El principio es que te escuchamos hasta entender bien cuáles son tus necesidades y aspiraciones. Con eso ponemos nuestras cabezas a trabajar y te damos ideas (escucha, más de 20 años de profesión dan para probar muchas cosas). 

Está claro, tu casa te tiene que gustar a ti, no a nosotros.

Entonces, volviendo al principio, ¿empezamos a trabajar juntos?

Rellena el formulario y vemos si podemos trabajar juntos.

Preguntas frecuentes

¿Pero al final los arquitectos no son otro gasto más para el promotor?

Los arquitectos son, en muchas obras, obligatorios por ley para dar unas mínimas garantías de seguridad a los promotores en cuanto al cumplimiento de las normativas vigentes. Hay también obras en las que no es obligatorio, por sus características, la intervención de ningún técnico.

Pero nuestro trabajo es ayudarte a resolver tus problemas con los recursos que tienes para ello, de la forma más sencilla y eficiente posible y guiarte en todo el proceso de construcción, tanto desde el punto de vista administrativo como luego en la propia obra.

Si el único motivo por el que nos vas a contratar es porque necesitas una firma, probablemente estás buscando en el sitio equivocado.

Si no, estamos seguros de poder ayudar.

Y si no, también te lo diremos.

¿Hacen falta más profesionales técnicos o lo hacéis todos vosotros?

Nosotros nos encargamos de toda la parte de proyecto y de la dirección de obra. Según el tipo de edificio, normalmente es necesario que exista también una dirección de ejecución de la obra. Esa labor recae en un arquitecto técnico o ingeniero de la edificación. Tenemos nuestros colaboradores habituales, pero estamos abiertos a trabajar con personas de tu confianza.

¿Hacéis vosotros también la obra?

No somos una empresa constructora. Nosotros hacemos la parte de proyecto, gestión de licencias y dirección de obra.

La construcción debes contratarle aparte.

Quizás podamos recomendarte alguna empresa que conozcamos y que pensamos puede encajar con tu obra, y te ayudaremos a elegir empresa si pides presupuesto a varias, que es lo recomendable.

Siempre estamos interesados en conocer nuevas y buenas constructoras.

¿Quién pide las licencias y está al tanto del papeleo con el ayuntamiento?

Como parte del encargo podemos ocuparnos de llevar la relación con el ayuntamiento para que no tengas que preocuparte del tema.

Quiero hacerme una casa ¿Tengo que estar yo pendiente de la obra?

Solo tienes que estar pendiente lo que tú quieras. No es tu trabajo dirigir la obra, sino el nuestro. No es necesario que estés en el día a día de la obra, y de hecho hemos hecho obras para clientes que viven en otras provincias o países.

Me pasa que me cuesta entender los planos, ¿cómo sabré que me va a gustar el proyecto construido?

Además de los planos, representamos el proyecto en 3 dimensiones para que te hagas una idea clara de cómo quedará todo.

¿Esto vale para mí si quiero hacer una promoción de viviendas?

Sí, claro. Vale para quien necesita un proyecto de arquitectura. Es decir, va a hacer una obra partiendo de un solar vacío o quiere reformar algo existente.

¿Cuánto cuesta un proyecto?

Depende del caso, de la superficie de actuación y de la complejidad. Para que te hagas una idea, para una vivienda de 120 m2s y unos 3 dormitorios que se quiere reformar de arriba a abajo, el precio mínimo es 8500€

¿Se paga todo de golpe?

No, hay distintas fases de proyecto y se va cobrando por fases. Todo esto se detalla en la oferta de honorarios que te haremos.

¿Trabajáis con presupuesto cerrado?

El de nuestros honorarios, sí. Otra cosa es el coste de obra que ya no depende directamente de nosotros. Eso dependerá del contrato que hagas con la constructora.

¿Cuánto tardo en poder vivir en mi casa desde que empiezo el proyecto con vosotros?

Es una pregunta difícil que depende de muchos factores: complejidad del proyecto, tiempo de tramitación y tiempo de construcción en sí.

Podemos decir que en una reforma interior completa pueden pasar entre seis y ocho meses, y en un proyecto de una vivienda nueva puede irse al año y medio o dos años.

De todas formas, estos temas se tratarán en las primeras reuniones que tengamos, una vez conozcamos en detalle tus necesidades.

Y si el tiempo es un factor crucial para tí, veríamos las posibilidades que tienes de cumplir tus plazos.


¿Quieres entonces asegurar tu futuro y el de los tuyos invirtiendo en una casa?

Rellena el formulario y vemos si podríamos trabajar juntos.

¿Todavía por aquí?

A lo mejor no quieres contactarnos todavía.

No estás seguro aún de lo que quieres hacer.

No sabes de qué pie cojeamos.

Si quieres que te contemos lo que hacemos, recibir ideas que puedas aplicar o enterarte de los entresijos de las licencias, apúntate abajo.

Y de regalo te llevas el caso de éxito del local de Sevilla que se convirtió en una casa a lo Manhattan. Para que veas que se pueden hacer cosas que no se te habían pasado por la cabeza.